Todo tiene su tiempo

 



Todo tiene su tiempo

Hay un tiempo para todo lo que se requiere bajo el cielo y sin duda también hay un tiempo en el cual Dios nos pedirá cuenta de todo nuestro trabajo.

 

Desde el punto de vista espiritual en el libro de Eclesiastés 3:1 al versículo 8, dice:

1 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora, Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de destruir, y tiempo de edificar; tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de endechar, y tiempo de bailar; tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar; tiempo de buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar; tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar; tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, y tiempo de paz.

TIEMPO: El tiempo es una magnitud física con que se mide la duración o separación de acontecimientos. . El tiempo permite ordenar los sucesos en secuencias, estableciendo un pasado, un futuro y un tercer conjunto de eventos ni pasados ni futuros respecto a otro.

Sí hay tiempo para lo que deseamos, que cada suceso tiene su espacio, que por más que parezca imposible, si es necesario saber manejar y distribuir de manera adecuada cada minuto de nuestra subsistencia.

El apostol Pablo el Apóstol es muy meticuloso y acertado en sus recomendaciones.

Tel y como le escribe a la iglesia asentada en la ciudad de Éfeso

Efesios 5: 15 Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, 16 aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. 17 Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.

Al parecer en esta ciudad existían dos tipos de creyentes, como puede suceder los mismo en la iglesia actual.

Creyentes necios: La necedad es el resultado de que una persona está usando mal la inteligencia que Dios le ha dado. Un necio usa sus destrezas de razonamiento para tomar decisiones equivocadas. La forma más básica de la necedad es negar la existencia de Dios, o decirle "no" a Dios (Salmo 14:1). La biblia asocia la insensatez con el que fácilmente se enoja (Proverbios 14:16-17), con el de labios perversos (Proverbios 19:1), y con la desobediencia a los padres (Proverbios 15:5). Nacemos con una insensatez innata, aunque la disciplina ayudará a entrenarnos en sabiduría (Proverbios 22:15).

Proverbios 19:3 dice que la necedad es contraproducente: "La insensatez del hombre tuerce su camino.

Creyente sabio: El creyente en Cristo recibe el hábitat de Dios (2 Pedro 1:4), que incluye la mente de Cristo (1 Corintios 2:16). Apoyándose en el poder del Espíritu Santo que habita en el creyente, éste puede rechazar la necedad. Sus pensamientos pueden agradar al Señor, y puede tomar decisiones que glorifiquen a Dios en la medida que él enriquece su vida y las vidas de quienes le rodean (Filipenses 4:8-9; Efesios 5:18-6:4).

De nosotros depende como aprovechar nuestro tiempo, siendo sabios y entendidos de cuál sea la voluntad de Dios en nuestro tiempo.

Cada vez mas vemos cristianos sumergidos en los afanes de la vida y esto puede ser necedad y puede dirigir al creyente al ahogamiento espiritual, como podemos ver en el libro de Marcos 4:19 pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa.

Tenemos entonces suficientes razones para un aprovechamiento del tiempo de una manera insuperable, estando plenamente ocupados en todo aquello que nos traiga verdadera construcción espiritual y mayor calidad de vida.

Recomendaciones para aprovechar bien el tiempo

1- Instaurar prioridades

Sin duda alguna la prioridad numero uno en la vida del creyente es buscar es : 
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33.

Es una la voluntad de Dios y es lo primero que debemos de hacer en nuestro diario vivir, considerar a Dios en todo lo que hagamos, esto trae grandes bendiciones. Deuteronomio 6:3 Oye, pues, oh Israel, y cuida de ponerlos por obra, para que te vaya bien en la tierra que fluye leche y miel, y os multipliquéis, como te ha dicho Jehová el Dios de tus padres.

Dando prioridad a los programas más apremiantes. lo importante es establecer prioridades, pues esto le llevará a que todo día que pasa este marcado por lo se pude resaltar como “eventos cotidianos”.

2- La apreciación del tiempo

Consideremos que los días son malos, es por eso que debemos de considerar que nuestro tiempo en todo lo que realmente es necesario:

1.     Dios : 
amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. Deuteronomio 6:5.

2.    La Familia: Me pusieron a guardar las viñas; Y mi viña, que era mía, no guardé. Cantares 1:6.

3.    Nuestro Trabajo : 
Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo. 1 Corintios 15:10.

2 Tesalonicenses 3:6

El deber de trabajar

Pero os ordenamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que ande desordenadamente, y no según la enseñanza que recibisteis de nosotros.

Esto significa que siempre habrá una razón muy grande para aprovechar cada hora de todo día de la semana, el mes y el año.

3- El plan en el tiempo

Existen distintos factores que quitan el tiempo y en cierto momento llegan a producir estrés; el envío de correos electrónicos, el mal uso del teléfono, el perfeccionismo, las redes sociales, no plantear metas concretas, entre otras; son distractores que llegan a mermar la productividad diaria.

Algunos consejos para organizar tu tiempo y mejorar el desempeño del día a día son:

  1. Planifica tu viaje. Definir una buena agenda de actividades permitirá priorizar con certeza y avanzar en las cosas más relevantes; lo no importante y no urgente, no merece dedicarle tiempo, es mejor descartarlo inmediatamente, como los emails y las llamadas inesperadas, entre otras cosas.
  1. Prioriza. Es bastante común pensar que se tienen más cosas por hacer que las horas que tiene el día, por lo que al priorizar las actividades se asegura que las tareas más importantes no se queden sin resolver. Hay que procurar que el orden de las tareas a realizar obedezca a una adecuada jerarquización de objetivos.
  2. Delega tareas. En caso de que seas líder o coordinador, no dudes en delegar tareas a otras personas, en ocasiones nosotros no podemos hacerlo todo.
  3. Finaliza lo que empiezas. Siempre que inicies una tarea, asegúrate de tener la mente fija en que vas a concluirla antes de iniciar otra.
  4. Valora tu tiempo. Buscar hacer equipo y tener empatía con los demás para facilitar las tareas y así agilizar las actividades pendientes.
  5. Aprender a decir “no”. De todas las actividades ¿cuántas son generadas por uno mismo y cuántas son producto de haber dicho sí a un amigo?, es recomendable evitar los problemas intrascendentes y saber decir que no, muchas veces los favores ni se agradecen ni se pagan; para una mejor administración del tiempo es clave no perder el control ni sobrecargar la agenda.
  6. Comunicación. Un equipo de trabajo funciona de mejor forma y es capaz de aprovechar más el tiempo si existe una buena comunicación entre sus integrantes.
  7. Descanso. Para poder contar con horas productivas, se deben de tener también horas de descanso, pues el organismo y la mente deben regenerarse para funcionar correctamente.
  8. Caminos alternativos. Funciona tanto en los traslados como en las ocasiones en las que hay que buscar segundas opciones para una tarea o una obligación, nunca dejes que te sorprendan
  9. Conócete a ti mismo. Si hacemos un trabajo por conocernos, sabremos cuáles son los momentos del día en los que somos más productivos, y cuáles son aquellos en los que somos más susceptibles a las distracciones.

4- La dirección de Dios

Santiago 4:13-15 No os gloriéis del día de mañana

13 !!Vamos ahora! los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y traficaremos, y ganaremos;

14 cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece.

15 En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello.

Santiago nos invita a reflexionar sobre la caducidad de la vida. Los comerciantes, de los que se habla aquí, olvidan que el mañana no les pertenece. El futuro está únicamente en manos de Dios. Aunque el hombre propone, es Dios el que dispone. Por cuya razón, la conducta de esos fieles es insensata, como la del rico de la parábola, que, habiendo tenido una buena cosecha, pensaba que ya tenía reservas para muchos años, prometiendo muy felices y descansadas las etapas futuras de la vida. Pero aquella misma noche oyó la voz del Señor, que le decía: “Insensato, esta misma noche te pedirán el alma, y todo lo que has acumulado, ¿para quién será?” (Lúcas 12:13-21).

Otras maneras de perder el tiempo

Leyendo libros necesitados en contenido, escritos por personas morbosas e incultas, carentes de ética y valores.

Mirando transmisiones de televisión barata, cuyos contenidos apuntan la violencia, la pornografía, la vida fácil, el enriquecimiento ilegal, la destrucción de la familia y el fomento de la holgazanería.

Estar horas, días y noches en juegos de azar, apostando a las fantasías y quimeras de la buena suerte, cuyos resultados en la mayoría de los casos, son la pérdida de la salud, la adquisición de úlceras gástricas por falta de alimentación adecuada y a tiempo, y por su puesto, la pérdida de las últimas monedas que tenía como ahorro sagrado.

Círculos cargadas de glotonería, licores y drogas, acompañadas de amistades con lenguaje corrompido, donde abundan las truhanerías, la falta de respeto por la ética y los valores, las burlas respecto a lo divino, la sexualidad aberrante y desmedida, el relajo y las manifestaciones patentes de la violencia.

PERFECCIONANDO EL TIEMPO

Tiempo en oración

Daniel 6:10 Y cuando Daniel supo que el edicto había sido firmado, entró en su casa, abrió las ventanas de su alcoba que daban hacia Jerusalén, y tres veces al día se arrodillaba y oraba a su Dios, dándole gracias como acostumbraba hacerlo.

Tiempo de ayuno

Mateo 6:17-18 Pero tú, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, para no mostrar a los demás que estás ayunando, sino a tu Padre que está en secreto, y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.

Tiempo de lectura bíblica

I Timoteo 4:11-15 Esto manda y enseña. Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza. Mientras llego, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza. No descuides el don que hay en ti, y que recibiste mediante profecía, cuando se te impusieron las manos del presbiterio. Ocúpate en estas cosas, y permanece en ellas, para que tu aprovechamiento sea evidente a todos.

Tiempo de estudio

Hechos 17:10-11 Esa misma noche, los hermanos enviaron a Pablo y Silas hasta Berea. Y cuando éstos llegaron allá, entraron en la sinagoga de los judíos. Éstos eran más nobles que los de Tesalónica, pues recibieron la palabra con mucha atención, y todos los días examinaban las Escrituras para ver si era cierto lo que se les anunciaba.

Tiempo para preparar los temas de enseñanza

Eclesiastés 12:9-11 Mientras más sabio llegó a ser el Predicador, más conocimientos impartió a la gente. Ponderó, escudriñó y compuso muchos proverbios. Además, el Predicador se esforzó por hallar palabras agradables y por escribir con precisión palabras verdaderas. Las palabras de los sabios son como aguijones, y el conjunto de las palabras de los maestros, impartidas por un solo guía, son como clavos bien hincados.

Tiempo para predicar la palabra

Hechos 4:32-33 Todos los que habían creído eran de un mismo sentir y de un mismo pensar. Ninguno reclamaba como suyo nada de lo que poseía, sino que todas las cosas las tenían en común. Y los apóstoles daban un testimonio poderoso de la resurrección del Señor Jesús, y la gracia de Dios sobreabundaba en todos ellos.

Conclusión:

El manejo del tiempo es importante debido a la brevedad de nuestras vidas. Nuestra trayectoria en esta tierra es significativamente más corta que lo que nos inclinamos a pensar. Como David tan acertadamente señala, "Hazme saber, Señor, mi fin, y cuánta sea la medida de mis días; sepa yo cuán frágil soy. He aquí, diste a mis días término corto, y mi edad es como nada delante de ti; ciertamente es completa vanidad todo hombre que vive" (Salmo 39:4-5). El apóstol Santiago hace eco de esto: "Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece" (Santiago 4:14). En efecto, nuestro tiempo en la tierra es fugaz; de hecho, es infinitamente pequeña en comparación con la eternidad. Para vivir como Dios quiere que vivamos, es esencial que aprovechemos al máximo nuestro tiempo.

EXPRESIONES QUE VALORAN EL TIEMPO

“Tu tiempo es limitado, así que no lo malgastes viviendo la vida de otro,… Vive tu propia vida. Todo lo demás es secundario.”
-Steve Jobs (1955-2011)

“¿Amas la vida? Pues si amas la vida no malgastes el tiempo, por que el tiempo es el bien del que está hecha la vida.”

-Benjamín Franklin (1706-1790)

“El tiempo es la cosa más valiosa que una persona puede gastar.”
-Theophrastus (300-287 A.C.)

“El tiempo es la divisa de tu vida. Es la única divisa que tienes, y solo tu puedes determinar como será gastada. Se cuidadoso y no permitas que otras personas la gasten por ti.”
-Carl Sandburg (1878-1967)

“Un hombre que se permite malgastar una hora de su tiempo no ha descubierto el valor de la vida.”
-Charles Darwin (1809-1882)

“Lo único que realmente nos pertenece es el tiempo. Incluso aquel que nada tiene, lo posee.”
-Baltasar Gracián (1601-1658)

“El tiempo es a la vez el más valioso y el más perecedero de nuestros recursos.”
-John Randolph (1773-1833)


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